El relevante y prestigioso abogado, dirigente político y hombre público chivilcoyano, Dr. Francisco José Falabella
Se conmemora el Centenario de su natalicio, acaecido el 4 de junio de 1920
El 4 de junio de 1920, vio la luz en nuestra ciudad, el relevante y prestigioso abogado, dirigente político, orador, periodista, escritor, docente y hombre público chivilcoyano, Dr. Francisco José Falabella, toda una auténtica y verdadera personalidad lugareña, con vasta proyección de orden nacional, que a lo largo de una prolongada y rica trayectoria, hubo de caracterizarse y distinguirse por su profunda y genuina vocación, su gran capacidad intelectual y calidad humana, su íntegra y admirable coherencia ideológica, fiel a los principios y convicciones, sus amplios y heterogéneos conocimientos, su magnífica y brillante elocuencia, su gravitación, claro ascendiente y hondo predicamento y, su actitud de servicio, cordial y afable, dispuesta a tender una mano franca y generosa, al prójimo y los semejantes. Nació en el hogar de Don Rafael Juan Falabella y Doña Rosa Palmiero, quienes, al igual que a sus hermanas, supieron inculcarle el amor y la veneración, hacia los valores morales y cristianos, la religión, las normas éticas, las queridas costumbres familiares y las viejas y arraigadas tradiciones del pasado y los mayores. Su padre, Don Rafael Juan Falabella (1888 – 1942), fue intendente municipal de Chivilcoy, entre 1932 y 1934, y desde 1936 hasta 1938, desarrollando una gestión laboriosa y progresista.
El Dr. Francisco José Falabella, hubo de cursar sus estudios primarios, en las aulas del antiguo Colegio “Del Buen Consejo”, perteneciente a los sacerdotes agustinos, de la inolvidable Capilla del Carmelo, y luego, desde el 16 de julio de 1937, de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen; los secundarios, en el Colegio Nacional “José Hernández”, obteniendo el título de bachiller, en 1937, y los universitarios, en la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de La Plata, graduándose de abogado, en el mes de enero de 1942, después de cumplir y transitar una notable carrera, de alumno sobresaliente y aventajado.
Con el flamante y promisorio diploma, abrió las puertas de su estudio jurídico, ejerciendo asimismo la enseñanza, en la Escuela Normal “Domingo Faustino Sarmiento”, de nuestra ciudad. Por otra parte, fue asesor legal de distintas instituciones, e integró y presidió diferentes entidades sociales, volcando en ellas, su saber, su entrega, su firme empeño y, su acción eficaz y constructiva, con un gesto de cooperación, ayuda y servicio, frente al vecindario, la gente y la comunidad.
En el campo del quehacer político y partidista, siempre leal a sus ideales y postulados filosóficos y doctrinarios, fue edil, en el recinto del Honorable Concejo Deliberante local; comisionado municipal de Chivilcoy, desde el mes de marzo, hasta junio de 1957; diputado en la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires, a comienzos de la década de 1960, y diputado en el Congreso de la Nación, entre los años 1973 y 1976. Creador de innumerables y valiosos proyectos, se distinguió por su extraordinaria y admirable oratoria y su palabra fluida y persuasiva. Por su iniciativa, su pujante impulso y su concreto y estimable apoyo, siendo diputado bonaerense, hubo de adquirirse la “Casa del Estudiante”, en la ciudad de La Plata (Para los alumnos universitarios, oriundos de Chivilcoy), inaugurada en el mes de octubre de 1964.
Fundador y director del diario “El Tiempo”, fue autor de artículos periodísticos, escritos en prosa, discursos y poemas, y a través de la prensa, difundió su pensamiento y sus conceptos y opiniones; bregando, en una férrea y fervorosa lucha, sin renuncias, defecciones ni claudicación alguna, por sus ideas rectoras y sus mejores y más elevados sueños.
El rumbo, el plan laboral y económico, y el destino de la República Argentina, según el Dr. Francisco José Falabella, en una entrevista realizada por la revista porteña “Gente”, a fines del año 1973:
“La prioridad número uno es que todo el pueblo trabaje, que el trabajo sea estimulado y organizado por el Estado, y que mediante la multiplicación de los bienes y la riqueza – única fórmula -, se le pueda dar al pueblo el bienestar general”.
Sin dudas, una definición magistral y contundente y, una sabia y honda visión del porvenir, que bien pueden adaptarse y aplicarse a la realidad actual de nuestro país; un país que, hoy más que nunca, en las difíciles y penosas horas presentes y en los días, acaso esperanzados, de un incierto futuro, necesita recuperar la fundamental y sagrada cultura del Trabajo, con un sentido hacedor y productivo, generando expectativas de inversión, auspiciosa actividad y próspera riqueza.
El Dr. Francisco José Falabella, falleció en Buenos Aires, a los 77 años de edad, el 11 de febrero de 1998, y sus restos descansan en nuestra ciudad. En el mes de diciembre de 2000, el conocido periodista local, Javier Omar González editó el volumen “El último caudillo”, una detallada e ilustrativa semblanza biográfica del Dr. Falabella, un hombre que, perdura en el recuerdo, el sentir y la emoción de los chivilcoyanos, como todo un modelo o ejemplo de autenticidad, capacidad, lucidez, absoluta fidelidad a sus valores y convicciones, versación jurídica y, proverbial generosidad.
Décima al Dr. Francisco José Falabella, por el procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano.
Político de la historia,
gran figura de abogado,
espíritu apasionado,
coherencia y fiel trayectoria.
Yo rescato su memoria,
y sé también, que hizo escuela,
al dejar su larga estela
de magnífico orador,
siendo por siempre, el doctor
Don Francisco Falabella.