El fotógrafo músico, y hombre de la cultura chivilcoyana, Rubén Osvaldo Lago (1927-2016).
El 25 de septiembre de 2016, falleció en nuestra ciudad, el notable y prestigioso Rubén Osvaldo Lago, una auténtica y verdadera institución chivilcoyana, y una polifacética y singular personalidad, en el campo de la fotografía, el cine, la locución, la música y, la investigación y constante difusión históricas; constituyendo así, de un modo claro, elocuente e incuestionable, un alto y valioso exponente del arte y el quehacer cultural. Nacido en 1927, cursó sus estudios, en las aulas de la antigua Escuela de Educación Técnica Nro. 1 “Dr. Mariano Moreno”; efectuó un aprendizaje de dibujo, en los ámbitos del recordado Ateneo de la Juventud “Dr. Juan Bautista Alberdi”, y se inició en la actividad fotográfica, hacia fines de la década de 1940. Radicado en Buenos Aires, hubo de atravesar por el cautivante mundo, de los estudios cinematográficos de la empresa E.F.A. (Establecimientos Filmadores Argentinos), y de regreso a Chivilcoy, promovió la fundación de “Splendid Films”; una realización pionera o precursora, en el rodaje de 16 milímetros; la cual, realizó la filmación, en 1947, de la película titulada: “Tras un crimen… un misterio”, que se estrenó en el cine Metropol, de nuestra ciudad, en el mes de diciembre de 1948. Durante muchos años, de entusiasta y perseverante labor, se desempeñó en calidad de locutor y director de programación, de la inolvidable radiodifusora “Sirena”; publicidad oral y callejera, que había creado, Don José Tito Ranni, el 9 de julio de 1934. En Buenos Aires, hacia 1960, concurrió como alumno de percusión, al Conservatorio “Manuel de Falla”, y aquí, en Chivilcoy, dentro de la faz musical, hubo de integrar, durante las décadas de 1960 y 1970, la importante Orquesta de Cámara – fundada por el profesor Pascual Antonio Grisolía, en 1961 -, y otros conjuntos de la época, tales como, el celebrado grupo de Ricardo Nelson y “Los Platinos”. Eximio artífice y maestro de la fotografía, llevó a cabo, numerosas y muy significativas exposiciones – la primera muestra, la realizó en Chivilcoy, en 1969 -, dentro del país, y en el exterior. Participó en relevantes salones fotográficos, y por su nivel estético, su vasta trayectoria, su alto talento creativo, y sus genuinos méritos, hubo de obtener, a través de su carrera, distinguidos y honrosos galardones. Mencionaremos así, el Primer Premio Nacional, de Arte Fotográfico Color, de la Secretaría de Cultura, de la presidencia de la Nación, en 1982. En otro orden, desde 1986, ejerció la enseñanza, como profesor de fotografía, en la Escuela Superior de Artes Visuales, de Chivilcoy. Hombre de múltiples y apreciables inquietudes, amplios conocimientos, una sólida y rica, formación profesional y técnica, y un profundo y particular dinamismo; a partir del año 1974, desarrolló por la emisora, L. T. 32 Radio Chivilcoy, ilustrativas audiciones, de divulgación histórica y musical, como “Viaje hacia la música” y “El cine y su música a través del tiempo”. El 22 de octubre de 2015, en el marco de celebración, del 161 aniversario, de la fundación de Chivilcoy, bajo la gestión municipal del profesor Darío Speranza, Rubén Osvaldo Lago, fue justa y merecidamente declarado “Ciudadano Ilustre”. En el mes de mayo de 2016, se lo designó, también, miembro correspondiente de la Honorable Academia de Folklore de la provincia de Buenos Aires. Asimismo, el 22 de mayo de 2016, por una iniciativa del señor Luis Gandolfo, se impuso el nombre de Rubén Osvaldo Lago, a la cabina de proyección, del cine Español Con un largo sendero recorrido, talento, versación, una trascendente obra, y un legítimo y bien ganado prestigio, Rubén Osvaldo Lago, representó un gran valor de la cultura, de nuestra ciudad, y todo un orgullo, artístico y espiritual, para Chivilcoy.
Al fotógrafo, Rubén Osvaldo Lago, soneto de Carlos Armando Costanzo.
De una forma especial, lo nombro ahora, – homenaje sincero y emotivo -, con su claro talento creativo, y su honda voluntad realizadora. Fiel pasión y pujanza emprendedora, un espíritu noble y sensitivo; un impulso tenaz, inquieto y vivo, largo empeño y un alma soñadora. Fotógrafo de ley, diestro y valioso, músico del oído melodioso, locución, cine, radio y gran figura… Hoy, lo nombro – enorme y rico mundo -, remarcando el trabajo tan fecundo, y su obra, por el arte y la cultura.
