El busto del Dr. Florencio Varela, realizado por el gran escultor chivilcoyano, profesor Antonio Bardi. Se inauguró el 22 de octubre de 1936.
El 22 de octubre de 1936, en el marco de los actos conmemorativos, del 82 aniversario, de la fundación de Chivilcoy, durante la gestión municipal, del intendente Don Rafael Juan Falabella, se hubo de llevar a cabo, la inauguración oficial del busto, del notable escritor, periodista y abogado, Dr. Florencio Varela (1807 – 1848), ubicado en el centro de la plaza homónima. Dicho busto de bronce, fundido en los talleres, de la entonces Escuela de Artes y Oficios de la Nación (Hoy, Escuela de Educación Técnica Nro. 1 “Dr. Mariano Moreno”), pertenece al caracterizado y prestigioso escultor y docente local, profesor Antonio Bardi. Un año antes, en 1935, se había conformado una comisión vecinal, para realizar la citada obra; la cual, se hallaba encabezada por un bisnieto del mencionado prócer, Don Rómulo Solveyra Varela. Se efectuó una colecta, de índole popular; se contó, con la valiosa colaboración de la comuna, y del entonces intendente municipal, Don Ángel San Romé, y se colocó la “piedra fundamental”, que hubo de bendecir, el titular de la parroquia San Pedro, presbítero, Dr. Luis Ramón Conti. El pedestal, lo construyó el propio municipio, observándose una placa, donde se consigna que: “El Dr. Florencio Varela, había nacido en Buenos Aires, el 23 de febrero de 1807, y murió, en forma trágica, en Montevideo, el 20 de marzo de 1848”. Estuvo presente, en el acto, el Dr. Horacio Béccar Varela, un descendiente directo, del prócer evocado, y participó además, la simpática y tradicional banda de música, del maestro italiano, Don Cándido Morábito. La ceremonia de inauguración y descubrimiento del busto, constituyó un especial y emotivo homenaje, a la figura del Dr. Florencio Varela, cuya plaza, en medio de la típica geografía, de una barriada pintoresca y populosa, fue bautizada por la Corporación Municipal, a través de una iniciativa de Don Manuel Villarino, el 6 de noviembre de 1866.
