Recordando al profesor Segundo L. Moreno  y a un libro de su autoría, de 1938, titulado “La República Argentina, futura gran potencia mundial”.

Recordando al profesor Segundo L. Moreno  y a un libro de su autoría, de 1938, titulado “La República Argentina, futura gran potencia mundial”.

septiembre 27, 2018 0 Por archivol
Compartir

La contracara del país actual, ochenta años después… La Argentina del “más de lo mismo…” (Año 2018).

La pincelada evocativa de la fecha, la dedicaremos a la recordación, de un destacado y prestigioso docente, – con seguridad, hoy, ya olvidado o totalmente desconocido -, quien hubo de ejercer la enseñanza, en las aulas del viejo Colegio Nacional “José Hernández”, de nuestra ciudad. Nos estamos refiriendo, al profesor Segundo L. Moreno, el cual, ejerció sus actividades pedagógicas, en el citado establecimiento educacional, a lo largo de varios años, de una fiel y sostenida labor; desde el instante mismo, de la inauguración y apertura, del Colegio Nacional, el 17 de mayo de 1914. En aquella lejana época, dicha casa de estudios, cuyo primer rector, fue el Dr. Aurelio S. Acuña, funcionaba en una antigua casona, arrendada a la familia Badano, sita en la intersección de las calles San Lorenzo y Garibaldi. Don Segundo L. Moreno, hubo de cumplir funciones, de secretario, del establecimiento, y asimismo, estuvo al frente de la cátedra de “Castellano”. En otro orden, el profesor Segundo L. Moreno, se desempeñó como Inspector General de Escuelas para Adultos y Militares, del Consejo Nacional de Educación, y fue además, docente de “Historia Argentina”, en el Colegio Nacional de Adrogué; docente, de “Geografía Física, de Argentina y América”, y titular de la materia “Geografía Económica y Política, argentina y americana”, en el Colegio Nacional “Juan Martín de Pueyrredón”, de Buenos Aires. En el año 1938, el profesor Segundo L. Moreno, editó el interesante y sugestivo libro “La Argentina, futura gran potencia mundial”; un volumen, que hubo de redactar, entre el 17 de agosto de 1936, y el 20 de junio de 1937. La mencionada obra, de unas 220 páginas, se encuentra dividida en unos ocho capítulos, y está encabezada, por una conceptuosa carta, al autor, del general Don Francisco Medina. En el capítulo primero, de acuerdo con las propias palabras y consideraciones, del profesor Moreno, “se demuestra que la República Argentina, por la extensión y riqueza del territorio, por el origen de sus habitantes, por las bases políticas, sociales y económicas, que le dieron los creadores y organizadores de la nacionalidad, puede y debe convertirse, dentro de los próximos cincuenta años, en una gran potencia de tipo occidental”. En el capítulo sexto, según lo manifiesta el profesor Moreno, “se estudia el gran problema de la educación, y se demuestra que debemos formar un tipo humano, que a la vez que sea fuerte, sano, viril, sereno y laborioso, tenga también conciencia de su destino en el mundo, y trabaje por cimentar la herencia de civilización y progreso, que le viene del fondo de la historia argentina. Este postulado a cumplir, es indispensable, para que la República pueda ser un día, una gran potencia civilizada y civilizadora”. Por último, en el capítulo octavo, el profesor Segundo L, Moreno, remarcaba que: “La Argentina, para convertirse en una gran potencia de tipo occidental, debe acrecer las fuerzas del espíritu y las fuerzas morales, porque ellas, gobiernan el mundo”. Hoy, la actualidad, después de haber transcurrido, ochenta años, de la publicación, de la mencionada obra, del profesor Moreno, nos ofrece, por desgracia, el triste y deplorable panorama, de un país, totalmente endeudado y empobrecido… Un país, inmerso, en el obscuro e implacable círculo vicioso del “más de lo mismo””, donde no cambia nada, nunca pasa nada, todo queda en la nada, siempre se habla mucho, de lo mismo, todos son iguales, todo da lo mismo y, todo termina, inexorablemente siendo, más de lo mismo… Un país, ya sin mercado interno y sin capacidad de compra y poder adquisitivo, por parte de la gente, donde, hay quienes se han hecho y se hacen ricos, sin trabajar, y contrariamente, siempre pierde, se perjudica y, hasta se funde, la persona buena, honrada y laboriosa, que Trabaja…  Un país, con una ciudadanía, desalentada, agobiada y abrumada, por las crisis financieras, los procesos inflacionarios, los ajustes, la recesión, el desempleo, las apariencias y el cartón pintado, la pavada, las pesarosas cargas impositivas y tributarias, las injusticias y desigualdades sociales, la corrupción, la impunidad y, la carencia de proyectos, expectativas y un buen horizonte de futuro… Un país, con las clases trabajadoras y pasivas, y los sectores obreros y populares, muy lejos de las aspiraciones básicas, el salario digno y el bienestar merecido…   Un país, donde no se mencionan, los factores esenciales y primordiales, del Trabajo y saludable,  y la auspiciosa generación de actividades productivas… Un país que, pareciera funcionar, únicamente, con emisión monetaria y, un enorme endeudamiento externo, ante  los organismos de crédito, internacionales… Un país, quizá, rico, próspero y opulento, para una minoría privilegiada, mientras el resto de los habitantes, sufren las graves y dolorosas consecuencias, de la marginación, las penurias y la miseria… Un país,  con una abundante cantidad de promesas engañosas e incumplidas; mucha falta de honradez, verdad, responsabilidad, solidaridad y compromiso; la constante nivelación hacia abajo y, los resultados, concretos y tangibles, a la vista… No podemos aguardar, resultados distintos, haciendo siempre lo mismo, y los Hombres, como los árboles, se conocen por sus propios frutos. Un país que, debe recuperar, los principios éticos y los valores morales, humanos patrióticos y espirituales, los edificantes y aleccionadores ejemplos de conducta y, la mentalidad, la conciencia y la cultura del Trabajo… Hoy, más que nunca, necesitamos Valores y Buenos Ejemplos… Solamente, hay un rumbo posible: El camino de la Educación, la Honestidad y el Trabajo.  Quiera Dios que, en un porvenir, venturoso y esperanzado, se haga feliz realidad, el noble y hermoso sueño, del profesor Segundo L. Moreno, a través de su libro: “La Argentina, futura gran potencia mundial”, del año 1938.