Sucesos del mes de mayo…
El 1 de mayo de 1956, nació la inquieta y destacada poetisa, escritora e investigadora, Alicia Marino de Devincenzi, quien, a lo largo de varias décadas, de una entusiasta y perseverante labor, ha cumplido y desenvuelto, una fiel y apreciable trayectoria, en la esfera de las letras, las expresiones artísticas y el quehacer cultural. Colaboró en diarios y revistas, de nuestro medio; fue autora de distintos volúmenes de versos, y un libro, con una ilustrativa y valiosa reseña, sobre la historia de la localidad de Moquehuá; integró diferentes antologías nacionales; obtuvo premios y galardones, por su digna y meritoria obra y, desarrolló, asimismo, ciclos y audiciones, de índole radiofónica. Su esposo, Jorge Devincenzi, ejerció las funciones, de delegado municipal en Moquehuá, durante la gestión, del intendente comunal, Dr. Jorge Adalberto Juancorena.
El 18 de mayo de 1842, vio la luz, en la ciudad española de Santiago de Compostela, el inspirado y notable poeta, escritor, periodista, dramaturgo y docente, Manuel López Lorenzo, quien hubo de establecerse y afincarse, posteriormente, en Chivilcoy; desarrollando en nuestro medio, una infatigable y fecunda tarea, dentro del campo de las letras, el ejercicio de la prensa, la vida teatral y la enseñanza. Autor de sentidas y bellas composiciones poéticas, llenas de amor, ensueño, ternura y lirismo; compuso distintas piezas, dramáticas y escénicas; colaboró en publicaciones locales; integró la Asociación Española de Socorros Mutuos y la Logia Masónica “Luz del Oeste del Valle de Chivilcoy” y, fundó y dirigió, la Escuela Politécnica, creada hacia el mes de agosto de 1876. Dejó de existir, en plena juventud, a los 40 años de edad, el 28 de abril de 1883.
El 24 de mayo de 1867, en el teatro “Victoria”, de Buenos Aires, se registró el estreno, del memorable tango “El negro Schicoba”, que contó con la interpretación vocal, del actor panameño, Germán Mackay. Dicha pieza, precursora o pionera, en el vasto y tan rico historial tanguero argentino, surgió aquí, en Chivilcoy, hacia 1866, creada por el músico, pianista y compositor, José María Palazuelos, quien había sido contratado, a través de la entonces Corporación Municipal, para desempeñarse como docente, y residió varios años, en nuestra ciudad.
El 23 de mayo de 2003, en virtud de una feliz y acertada iniciativa, del reconocido intérprete musical, Jorge Raúl Destaville, el Honorable Concejo Deliberante local, a través de la ordenanza Nro. 5470, bautizó y declaró “Esquina de Tango”, la antigua y tradicional cafetería “La Perla”, del señor Ítalo Mucci, ubicada en pleno radio céntrico, de la geografía urbana, de Chivilcoy, en la intersección de la avenida Villarino y la calle 9 de Julio. Dicha esquina, típica e inconfundible, constituye un auténtico solar histórico, y un verdadero símbolo o emblema, dentro de las páginas evocativas, del ayer lugareño, y en las profundas raíces, la vida y el genuino espíritu, de nuestra ciudad. En ese mismo sitio, de claros y perdurables recuerdos fundacionales, breve tiempo después, del nacimiento de Chivilcoy, aquel domingo 22 de octubre de 1854, hubo de construirse un humilde rancho que, convertido en una modesta capilla religiosa, ofreció el ámbito más adecuado, para la celebración, de los primeros oficios litúrgicos eclesiásticos. Muchos años más tarde – fines del siglo XIX y principios del XX -, se instaló en el lugar, un café, que correspondía a la firma “Giner e Isasmendi”, el cual, convocaba, diariamente, al vecindario chivilcoyano, de la época. Además, en aquel lugar, hacia la década de 1910, funcionó un comercio de tienda, denominado «La Universal», propiedad del señor José Lago. Con posterioridad, desfilaron distintos propietarios, hasta llegar a los últimos años, de la década de 1930, cuando adquirió dicha cafetería, el señor Humberto Ferrari, quien habilitó un bar, como anexo, y hubo de sumar a ese espacio, algunos billares, para distracción y esparcimiento, de los habituales concurrentes. En la década de 1950, administrada por los hermanos Cadavid, se denominó “La Macarena”, y luego, de algunos años de actividad, retornó a su clásico nombre “La Perla”. A lo largo de un fiel y prolongado itinerario cronológico, de constante atención y funcionamiento, la tan popularizada cafetería “La Perla”, brindó a su clientela, numerosos y brillantes espectáculos musicales, de una singular jerarquía artística; transitando por allí, intérpretes y orquestas, de un calificado nivel, nacional e internacional. La citada cafetería, posee una estimable biblioteca, dedicada a la temática del tango y el lunfardo, que lleva el ilustre nombre, del siempre recordado escritor, investigador y periodista, Gaspar José Astarita.
Procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano. Germán Carlos Nicolini, máster en P. C. e Informática, secretario del Archivo Literario Municipal.