El Día del Maestro y la figura de Domingo Faustino Sarmiento
Se conmemora cada 11 de septiembre, recordando el fallecimiento del ilustre educador, quien dejó de existir en Asunción del Paraguay, el 11 de septiembre de 1888.
Los vínculos que unieron a Sarmiento con Chivilcoy, desde los albores de nuestra ciudad.
Los homenajes chivilcoyanos a Sarmiento, a través de la historia lugareña.
Cada 11 de septiembre, se conmemora el Día del Maestro, recordando el fallecimiento en Asunción del Paraguay, del auténtico e ilustre educador de América, Domingo Faustino Sarmiento, quien dejó de existir, a los 77 años de edad, el 11 de septiembre de 1888, hace ya, 136 años transcurridos. Había nacido en San Juan, el 15 de febrero de 1811.
Sarmiento, descubrió esta región geográfica del oeste bonaerense y las chacras chivilcoyanas, hacia fines del mes de enero de 1852 (días 27 y 28), cuando atravesó la zona de la actual localidad rural de Gorostiaga, integrando las filas y las huestes del Ejército Grande, del general Justo José de Urquiza, el cual, se dirigía a Buenos Aires, para enfrentar a las tropas del brigadier general Juan Manuel de Rosas, derrotándolas en la batalla de Caseros, el 3 de febrero de 1852. Sarmiento, en aquel contingente militar, cumplía funciones de “boletinero”, viajando en una pesada carreta donde transportaba una pequeña imprenta portátil, y allí, el mismo, redactaba e imprimía los respectivos “boletines o partes diarios” de dicho Ejército Grande. En este lugar, sorprendido y admirado, ante la pujanza y la prosperidad de aquellas chacras chivilcoyanas y, el empeño, el tesón y la voluntad laboriosa de los labradores, allí, radicados, de inmediato, se interesó de manera viva y fervorosa, por los habitantes de dicho paraje, y desde aquel momento, estableció con ellos, profundos y entrañables vínculos personales, de sincero afecto y genuina amistad; subrayando, el trabajo, los sueños y el anhelo de progreso de los hombres de Chivilcoy.
A mediados del mes de marzo de 1857, visitó nuestra ciudad, para presidir la ceremonia inaugural de la primitiva capilla del pueblo, con su vibrante y sonoro campanario, y en esa oportunidad, pronunció una sentida y conmovedora alocución, frente a todo el vecindario, y unos siete meses más tarde, el 13 de octubre de 1857, siendo senador en la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, logró la sanción de la Ley de Tierras, para nuestro Partido de Chivilcoy, que favoreció, de un modo verdaderamente extraordinario, el desarrollo económico y la riqueza de la fértil y floreciente comarca, proporcionando múltiples y singulares beneficios a la agricultura lugareña. El 3 de octubre de 1868, en calidad de presidente electo, nueve días antes de asumir la primera magistratura de la Nación, Domingo Faustino Sarmiento estuvo en nuestro medio, y desde este punto geográfico del país, hubo de proclamar su célebre y memorable discurso: “Les prometo hacer cien Chivilcoy, con tierra para cada padre de familia y escuelas para sus hijos”; presentando y exhibiendo a nuestra ciudad, como todo un cabal y elocuente ejemplo de trabajo, lucha, esfuerzo y espíritu férreo, emprendedor y progresista.
El 28 de julio de 1856, la entonces Corporación Municipal – primer gobierno de la comuna, constituido e instalado el 25 de marzo de 1856 -, en un gesto de gratitud y generosidad, le donó a Domingo Faustino Sarmiento, una quinta cultivada, sita en el sector de la estación ferroviaria “Norte” y el molino “Martelletti Hnos.” Sarmiento, nunca se radicó en esta finca que, finalmente fue vendida, remitiéndosele al gran sanjuanino, el correspondiente importe dinerario.En noviembre de 1895, al bautizar el Honorable Concejo Deliberante local, las cuatro principales avenidas de Chivilcoy, a una de ellas, se le asignó el nombre de Sarmiento; el 18 de abril de 1925, se le impuso el nombre de Domingo Faustino Sarmiento, a la Escuela Normal, habilitada oficialmente, el 12 de abril de 1905; el 25 de mayo de 1944, se inauguró en la plaza 9 de Julio, el monumento a Sarmiento, obra artística del escultor argentino, Juan Zuretti y, el 22 de octubre de 2007, en la plaza central 25 de Mayo, se descubrió otro monumento sarmientino, en forma de libro, diseñado por la artista plástica y docente chivilcoyana, profesora María Ester Marangoni de Posik, el cual, reproduce los párrafos substanciales del famoso discurso de 1868: “Les prometo hacer cien Chivilcoy”. Además, la Escuela primaria Nro. 1, sita en la intersección de la calle Belgrano y la avenida Sarmiento y, demolida en el mes de abril de 1970, se denominaba “Domingo Faustino Sarmiento”. En octubre de 1938, el ingeniero agrónomo Mauricio Birabent, editó el siempre recordado libro sobre la historia chivilcoyana, desde sus orígenes hasta 1880, que tituló “El Pueblo de Sarmiento”; en 1941, el Dr. Francisco José Falabella entregó a la estampa un folleto acerca de la vida y la obra de Sarmiento y, en septiembre de 1988, con motivo del centenario de su muerte, Vicente José Abriola, publicó el volumen: “Sarmiento, el patriarca amigo de Chivilcoy”.
Oración al maestro olvidado…
La conmemoración del Día del Maestro, un nuevo 11 de septiembre, con la más cordial y expresiva salutación a todos los docentes chivilcoyanos, nos invita a elevar, humilde y sencillamente, ante el sagrado altar de la instrucción pública y la Patria, esta modesta y emocionada oración al maestro olvidado:
Yo sé que un rincón – cielo y distancia-, / del país, que hoy, acaso, te ha olvidado, / allí estás, con tu gran apostolado, / tu docencia y tu fiel perseverancia. / Frente a Dios, la miseria y la ignorancia, / tu voz siembra el saber esperanzado; / hacia todos te brindas, abnegado, / pero pocos valoran tu importancia… / Yo sé que en un rincón de mi Argentina, / allí estás, con tu entrega más genuina, / tu hondo amor, tu enseñanza verdadera… / Y así cumples el logro más hermoso: / Hacer Patria, de un modo silencioso, / levantando tu lucha y tu bandera.
Procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano.
Germán Carlos Nicolini, máster en P. C. e Informática, secretario del Archivo Literario Municipal.