Los fuegos artificiales, de la fiesta del Carmen
Fueron los emblemas más característicos y representativos, de esta histórica y memorable celebración patronal
Durante décadas, fabricados por Don José Casullo, iluminaron las noches de la festividad
A través de muchas décadas, de un prolongado y muy rico historial, recorrido de un modo cronológico, a través del tiempo y de los años, por la antigua y tradicional festividad en honor de la Virgen Nuestra Señora del Carmen, los tan curiosos, llamativos y deslumbrantes fuegos artificiales, constituyeron sin duda alguna, los emblemas más característicos y representativos, de esta memorable y tan arraigada celebración, en honor de la “patrona espiritual”, de Chivilcoy.
Dichos fuegos artificiales, se encendieron, empeñosa y entusiastamente, y hubieron de estar, firmes y presentes, desde los primeros momentos y, los promisorios y lejanos albores, de la festividad del Carmen, la cual, se inició los días sábado 20 y domingo 21 de julio de 1889 – hace ya, 133 años transcurridos -, cuando un grupo de inmigrantes italianos, encabezado por Don Pascual Grisolía (1835 – 1920) – una auténtica y respetable figura patriarcal, de nuestra comunidad -, decidió sentar las sólidas y duraderas bases fundacionales, de la citada celebración que, es la fiesta, religiosa y popular, pionera o precursora, y de mayor perdurabilidad, en los anales lugareños.
A lo largo de muchos años, aquellos maravillosos fuegos artificiales, llenos de magia, encanto y colorido, fueron confeccionados, eficazmente, de un modo diestro e ingenioso, por el notable pirotécnico chivilcoyano, José Casullo, quien hubo de sumar después, a otros colaboradores: sus hijos, distintos familiares, u otros vecinos, como el señor Rubén Lutorto. Posteriormente, se contrataron los servicios, de fábricas pirotécnicas, de nuestro país, que ofrecieron, además, cautivantes y bellos espectáculos visuales, de fuegos aéreos.
Finalmente, el Honorable Concejo Deliberante local, sancionó una ordenanza, determinando la prohibición de la pirotécnica, en los ámbitos territoriales, de nuestro distrito de Chivilcoy, y así, en virtud de dicha disposición oficial, desaparecieron esas inolvidables funciones e imágenes; pero en los ojos, el alma y el corazón del vecindario y de toda la comunidad, perdura aún, el vivo y palpitante recuerdo, de aquellos extraordinarios fuegos artificiales, que iluminaron tantas imborrables noches invernales, de la tradicional fiesta del Carmen.
Procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano. Germán Carlos Nicolini, máster en P. C. e Informática, secretario del Archivo Literario Municipal.