Los 170 años, de la Protesta de los 300 labradores chivilcoyanos
Registrada el 22 de mayo de 1854, la encabezó el ilustre fundador Manuel Villarino.
Proclamó heroicamente, el emblemático lema: “La tierra debe ser para quien la trabaja”.
El 22 de mayo de 1854, se registró la valerosa y memorable “Protesta de los 300 labradores”, que llevó a cabo de una forma resuelta y aguerrida, un importante grupo de nobles y muy laboriosos labriegos lugareños, encabezado por la singular figura del ilustre fundador Manuel Villarino (1815 – 1868), gran constructor y propulsor del crecimiento económico, el desarrollo y el promisorio y venturoso progreso de Chivilcoy, en sus humildes y lejanos albores históricos.
Dicha Protesta, que se hallaba dirigida a la Legislatura de la provincia de Buenos Aires, de un modo enérgico y vehemente, reclamaba la venta o el arriendo de las tierras fiscales de nuestro Partido chivilcoyano; las cuales, en aquel momento, estaban en poder de un puñado de terratenientes o latifundistas (alrededor de 28), beneficiarios directos de la siempre recordada ley de Enfiteusis, dictada y sancionada en tiempos de Bernardino Rivadavia. Esa ley, de la década de 1820, con sus efectos negativos y sus consecuencias perniciosas, había determinado que, aquellas tierras fueran detentadas y se encontraran en manos de unos pocos terratenientes; originando así, un manifiesto y deplorable perjuicio, a quienes, en verdad, con muchos esfuerzos y sacrificios, tenazmente, las trabajaban.
El citado documento, que hubo de redactar el propio Manuel Villarino – un hombre ciertamente, bien instruido, con un apreciable cuota de ilustración y cultura -, representó un antecedente, de carácter primordial y fundamental, de la posterior “Ley de Tierras del Partido de Chivilcoy”, que por una feliz y acertada iniciativa del entonces senador Domingo Faustino Sarmiento, sancionó la Legislatura bonaerense, el 13 de octubre de 1857, unos tres años más tarde.
Además, la “Protesta de los 300 labradores”, constituye un memorable hito, un genuino baluarte y, una gloriosa bandera en las páginas y los mejores recuerdos de nuestra historia agraria argentina. Un acontecimiento anterior, al vibrante “Grito de Alcorta” y, la fundación de la Federación Agraria de nuestro país, hacia 1912, que consagró después, el famoso lema y la expresiva consigna: “La tierra debe ser para quien la trabaja”.
La avenida 9, de nuestra ciudad, bautizada con el nombre de “Protesta de los labradores”, prolonga la memoria de un vibrante y significativo acontecimiento que, por su gravitación, magnitud y trascendencia, nos honra y enorgullece a todos los chivilcoyanos.
Procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano.
Germán Carlos Nicolini, máster en P. C. e Informática, secretario del Archivo Literario Municipal.