El monumento a Cristóbal Colón, de Chivilcoy
Se inauguró, hace ya, 133 años, el 12 de octubre de 1892, en el centro de la plaza homónima.
Fue el segundo que se erigió en el país y, uno de los primeros del continente americano.
Con motivo del cuarto centenario del descubrimiento de América, el 12 de octubre de 1892, se llevó a cabo la inauguración oficial del monumento a Cristóbal Colón, en el centro de la plaza homónima, la cual, con anterioridad, se denominaba Abraham Lincoln, en homenaje a la figura del ex presidente estadounidense; nombre impuesto por la Corporación Municipal, a través de una inquietud del pionero y fundador de nuestra ciudad, Manuel Villarino, el 6 de noviembre de 1866.
La iniciativa, para la erección del monumento a Colón, que fue el segundo en el país y, uno de los primeros dentro del continente americano, correspondió a los vecinos César Bataglini y José Fernández, y la magnífica y apreciable estatua, de significativas proporciones, la realizó el escultor local, Victorio Bocetti, quien poseía aquí, en Chivilcoy, un taller de modelado, y falleció breve tiempo más tarde, en 1896, donando curiosamente, su cráneo, a médicos locales. El pedestal – sólida y firme columna sobre la que descansa dicha obra artística -, la diseñó el notable arquitecto italiano, Carlos Luchini (1843 – 1907), el cual, entre otros importantes trabajos, dirigió el armado y la conformación de la fuente de la Diosa Hebe, en la plaza principal 25 de Mayo, inaugurada el 9 de julio de 1890 y la construcción del frontispicio del Cementerio Municipal, inaugurado el 6 de noviembre de 1893; el templo mayor de Nuestra Señora del Rosario, inaugurado el 24 de mayo de 1895; el Palacio Municipal, habilitado en 1900 y, la sede institucional de la Asociación Italia, inaugurada el 6 de julio de 1902. A fin de recaudar fondos dinerarios, para solventar y financiar el citado monumento a Cristóbal Colón, se impulsó, promovió y desarrolló una campaña de subscripción popular, en la que activamente participaron, las instituciones mutualistas: Sociedad Operaria Italiana, Asociación Española y, Sociedad Francesa.
Fue padrino de la ceremonia inaugural, el prestigioso jurisconsulto, catedrático universitario, magistrado, escritor, tratadista, periodista y hombre público chivilcoyano, Dr. Antonio Bermejo (1853 – 1929), ex presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, desde 1905 hasta su fallecimiento, durante un lapso de 24 ininterrumpidos años. Al no poder estar presente – el Dr. Bermejo era diputado nacional y, en el Congreso, ese mismo día asumió como nuevo presidente de la República, el Dr. Luis Sáenz Peña -, ocupó su lugar, representándolo, el eximio poeta, escritor, traductor y diplomático, Leopoldo Díaz (1862 – 1947), también oriundo de nuestra ciudad, quien pronunció una florida pieza oratoria.
En la base del monumento podemos leer la leyenda: “Colón. El Pueblo de Chivilcoy”, en los idiomas: castellano, italiano, francés y latín, que corresponden a cada una de las caras de la columna., donde se apoya la admirable estatua del descubridor de América. Había surgido una polémica, respecto a la lengua que debía utilizarse al inscribir la frase de la mencionada leyenda, para identificar la obra, y ante la falta de un acuerdo, se consultó al entonces titular de la parroquia San Pedro Apóstol, presbítero Manuel Badano, quien, con un perspicaz criterio, espíritu ecuánime y equitativo y, fundamentalmente, una profunda sabiduría, propuso una inscripción en 4 idiomas diferentes, resolviendo así, la curiosa y hasta insólita disputa. El monumento se completa con la presencia de los leones, símbolos o emblemas ibéricos, de la monarquía española.
Procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano.
Germán Carlos Nicolini, máster en P. C. e Informática, secretario del Archivo Literario Municipal.