CAFETERÍA “LA PERLA”: LA GRAN “ESQUINA DE TANGO” CHIVILCOYANA
PERTENECIENTE AL SR. ÍTALO MUCCI, FUE DECLARADA TAL, EL DÍA 23 DE MAYO DE 2003
La antigua y tradicional esquina de la calle 9 de Julio y la avenida Villarino, en pleno corazón céntrico, de la geografía urbana de Chivilcoy, donde se levanta la típica e inconfundible cafetería “La Perla”, propiedad del señor Ítalo Mucci, sin dudas constituye, todo un solar histórico y, un verdadero símbolo o emblema, dentro de las páginas evocativas del ayer, y en las profundas raíces, la vida y el espíritu, de nuestra ciudad. En ese mismo sitio, de claros recuerdos fundacionales, breve tiempo después, del nacimiento de Chivilcoy, aquel domingo 22 de octubre de 1854, se construyó un humilde y modesto rancho que, convertido en una capilla religiosa, hubo de brindar el ámbito adecuado, para la celebración de los primeros oficios litúrgicos lugareños. Años más tarde – fines del siglo XIX y principios del XX -, se instaló en ese punto, un café, que correspondía a la firma Giner e Isasmendi, el cual, convocaba, diariamente, al vecindario chivilcoyano, de la época. Con posterioridad, desfilaron distintos dueños, hasta llegar a los últimos años, de la década de 1930, cuando adquirió la citada cafetería, el señor Humberto Ferrari, quien habilitó un bar, en una dependencia anexa, y sumó a ese mismo espacio, algunos billares, para el esparcimiento y la distracción, de los asiduos y habituales concurrentes. Asimismo, en aquel lugar, funcionó, en la década de 1910, un comercio de otro rubro mercantil: la tienda “La Universal”, cuyo propietario, fue el señor José Lago. En la década de 1950, administrada por los hermanos Cadavid, la cafetería, pasó a denominarse “La Macarena”, y luego de varios años de actividad, volvió a su clásico nombre: “La Perla”. El 23 de mayo de 2003, merced a una oportuna y feliz iniciativa, del reconocido cantante chivilcoyano, Jorge Raúl “Canario” Destaville (1935 – 2024), el Honorable Concejo Deliberante, de nuestra ciudad, a través de la ordenanza Nro. 5470, bautizó a la entrañable cafetería, como “La Esquina de Tango”. A lo largo de un fiel y sostenido itinerario cronológico de más de un prolongado siglo, la muy popular cafetería, ofreció a su clientela, numerosos y calificados espectáculos musicales, de una particular jerarquía artística. Y bajo la actual administración, del señor Ítalo Mucci quien, junto al personal de dicha casa, ha desenvuelto y desplegado, una entusiasta e infatigable actividad realizadora; se organizaron magníficos y excelentes encuentros, de noches melodiosas e inolvidables, por las que transitaron, diferentes intérpretes y orquestas, de alto nivel local, nacional e internacional. La antigua y tradicional cafetería “La Perla”, es sin dudas, lo reiteramos, un glorioso baluarte, símbolo o emblema, siempre vivo y vigente, en la memoria histórica y el corazón, de toda nuestra comunidad chivilcoyana.
Y nosotros, ahora le decimos: Antigua y singular cafetería, / del encuentro y la charla placentera; / el romántico amor de primavera, / la canción, la amistad, la compañía… / Yo le canto a su clima de armonía, / sus recuerdos, su dicha verdadera; / su espacio familiar y su vidriera, / que a través de los años, sonreía… / Firme bastión, de larga trayectoria, / esquina del ayer – hermosa historia -, / y singular estampa ciudadana… / “La Perla” – yo la nombro, tiernamente -, / como símbolo vivo y permanente, / de la fiel tradición chivilcoyana.
Procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano, y miembro correspondiente, de la Academia de Folklore de la Provincia de Buenos Aires y la Academia Porteña del Lunfardo.- Germán Carlos Nicolini, máster en P. C. e Informática, secretario del Archivo Literario Municipal de Chivilcoy.