Continuemos bregando hacia delante…

Hoy, más que nunca, no obstante, y a pesar de las dificultades, adversidades y sinsabores, debemos continuar bregando hacia delante…, siempre hacia delante…

Hoy, más que nunca, debemos multiplicar nuestras fuerzas y fortalecer nuestro espíritu, enfrentando así, cada día, la muchas veces, patética y dramática realidad cotidiana…

Debemos continuar bregando, sin perder las ganas y motivaciones, el ímpetu, el ahínco, el entusiasmo y, la voluntad y capacidad realizadoras…

Debemos continuar bregando, para no hundirnos en la inacción, la pasividad y la inoperancia, y quedar sumergidos en un mar de incertidumbres, angustias, pesares y aflicciones…

Debemos continuar bregando, para no perder así, los proyectos, afanes y anhelos, las expectativas y la ilusiones; para que no se evaporen los sueños y se apaguen, el amor, la belleza, el rostro risueño, la alegría y el optimismo…

Debemos continuar bregando, para que siga viva, latente y luminosa, en la noche de nuestra existencia, la brillante y ardorosa llama de la esperanza…

Escuchame, chabón, atentamente, / el mistongo chamuyo de este día: / no perdamos los sueños, la alegría, / el amor y la jeta más sonriente. / No perdamos el cuore floreciente, / sin rencores, afano o fulería; / el abrazo pulenta de un gomía, / el laburo y la lucha más valiente… / No perdamos un kilo de optimismo, / y un cachito de fe, sin egoísmo, / ni tramoyas de chanta y atorrante… / Y con posta esperanza, bien genuina, / hoy, junemos el sol de la matina, / y sigamos luchando, hacia delante.