Hace ya, 182 años, llegó a nuestra región chivilcoyana, Federico Soarez
Había nacido en la Banda Oriental del Uruguay, en 1811, y se estableció en la zona de Las Saladas, hacia el mes de noviembre de 1842, en terrenos de Bernarda Frías de Gorostiaga.
En el mes de noviembre de 1842, hace ya, 182 años transcurridos, arribó a esta fértil y extensa región geográfica del oeste bonaerense, que por entonces dependía de la antigua y tradicional Guardia de Luján, el ilustre fundador y pionero lugareño, Federico Soarez, quien, había nacido en la vecina Banda Oriental del Uruguay, en el año 1811, y en plena juventud, resolvió emigrar, radicándose en nuestro país, con un puñado de ilusiones y esperanzados sueños de futuro.
Soarez, instaló y abrió las puertas de una típica y pintoresca pulpería, frente a las costas de Las Saladas, en terrenos que pertenecían a Bernarda Frías de Gorostiaga. Para establecerse en dicho lugar, gestionó la correspondiente licencia, ante el gobierno provincial del brigadier general Juan Manuel de Rosas, la cual, le fue posteriormente otorgada, el día 8 de noviembre de 1842. Asimismo, hubo de solicitar el respectivo permiso de las autoridades pertinentes, para la tenencia y eventual utilización de dos tercerolas y un sable, como armas de su defensa personal, en caso de sorpresivos incidentes, ataques, agresiones o cualquier otro episodio de índole delictiva.
Fue teniente alcalde, alcalde y juez de paz, de nuestro partido de Chivilcoy – creado mediante el decreto Nro. 1844, del gobernador de la provincia de Buenos Aires, brigadier general Juan Manuel de Rosas, el domingo 28 de diciembre de 1845 -; caracterizándose por su espíritu recto y ecuánime, su ascendiente o predicamento, su integridad de conducta y, su ejemplar honestidad. Encabezó la comisión vecinal fundadora de nuestra ciudad, aquel memorable y glorioso domingo 22 de octubre de 1854, y hubo de presidir, de un modo inicial, la Corporación Municipal, primer gobierno de la comuna, constituido e instalado, el 25 de marzo de 1856.
Falleció a la edad de 79 años, el 24 de marzo de 1890, y sus restos descansan en el cementerio porteño de La Recoleta, en el interior de la bóveda del general Miguel Estanislao Soler. En el mes de noviembre de 1895, cuando el Honorable Concejo Deliberante local, a través de ordenanza, bautizó a las cuatro avenidas principales de Chivilcoy, a una de ellas, le asignó el nombre de Federico Soarez. En 1952, cuando se produjo la desaparición física, el 26 de julio, de Eva María Duarte de Perón, el Concejo Deliberante, decidió reemplazar la denominación de Federico Soarez, por el nombre de la “Abanderada de los Humildes y Jefa espiritual de la Nación”. Pero en 1955, después del derrocamiento del gobierno justicialista, tras haber asumido las nuevas autoridades, de la “Revolución Libertadora”, en el mes de septiembre de aquel año, se le restituyó a esa avenida, el nombre original de Federico Soarez.
La evocación, entonces, de la personalidad, la trayectoria y la figura de Federico Soarez, todo un auténtico y verdadero prócer de nuestra historia chivilcoyana, quien llegó a esta región bonaerense, en noviembre de 1842, hace ya, 182 años…
Procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano.
Germán Carlos Nicolini, máster en P. C. e Informática, secretario del Archivo Literario Municipal.