La Argentina que fue… la Argentina perdida…

La Argentina que fue… la Argentina perdida…

septiembre 2, 2022 Desactivado Por archivol

La Argentina que fue… la Argentina perdida, reemplazada por un país de chantas, chorros y giles, que no tiene destino y no nos conduce a ninguna parte…

Con pesar, frustración, abatimiento y nostalgia, recordamos, sentimos, extrañamos y lloramos, todavía, la Argentina que fue…, esa Argentina de ayer, que conocimos…, la Argentina perdida…

La Argentina de los principios y valores, el sentido ético, la conciencia moral, la justicia, la verdad, la educación y la enseñanza, la cultura del trabajo, el esfuerzo, la lucha, el estudio, los auténticos y reales méritos, la nobleza, la probidad, la honradez y la decencia…

La Argentina del amor, la paz y la unión fraterna, el diálogo, el respeto, la hermandad, la solidaridad, la alegría y, la buena y armoniosa convivencia, entre vecinos y la propia gente…

Esa Argentina, reemplazada después, por el país del siempre lo mismo y el más de lo mismo, donde no cambia nada, nunca pasa nada, todo queda en la nada, siempre se habla mucho de lo mismo, todo resulta igual, todo da lo mismo y, todo termina inexorablemente siendo, siempre lo mismo y más, más de lo mismo… La Argentina, donde ganan siempre los mismos (los chantas, los chorros y los que viven de arriba) y pierden siempre los mismos (los laburantes y los giles, a quienes engrupen o engañan, distraen, entretienen, envuelven y confunden, los chantas de siempre).

Esa Argentina, que nivela e iguala hacia abajo, con ignorancia, vacío cultural, chatedad, vulgaridad, marginación social, resignación conformista y miseria, que perdió el sentido y, no nos lleva y conduce a ninguna parte…

Esa Argentina, en la cual, los valores, la justicia, la verdad, la honestidad, el trabajo, el esfuerzo, el estudio y, las personas de bien, decentes y laboriosas, parecieran no tener posibilidades, oportunidades, ni tampoco, cabida alguna…

Esa Argentina, que destruyeron, mataron y aniquilaron los chantas de siempre, juntamente con la fe, la euforia, el optimismo, la esperanza y, las ganas de vivir, trabajar, luchar, estudiar, avanzar, progresar y soñar… La destruyeron los chantas, mientras hubo quienes – cómplices del silencio -, se quedaron cruzados de brazos, sin mover un simple dedo, con el propósito de evitarlo… Para que triunfe el mal, sólo se necesita que los buenos no hagan nada, a fin de impedirlo…

Esa Argentina, donde los chantas de siempre – todos idénticos y entongados, detrás de un solo objetivo: conservar y acrecentar sus privilegios, prebendas, impunidades y beneficios, económicos y dinerarios -, engrupen o engañan a la gilada, valiéndose, cada día, de meras y vanas palabras, y una cortina de humo televisiva diferente; para que así, transcurran los años y el tiempo, se nos esfume la existencia y, al final, no cambie nunca nada, y todo, todo siga igual o peor de lo que está… Puro Gatopardismo: “Hay que cambiarlo todo, para que nada cambie”.

Esa Argentina de ayer, digna de ser amada, disfrutada y vivida… La Argentina, que desgraciadamente, ya no existe, y quizá, nunca más vuelva o retorne… La Argentina, que seguramente, no olvidaremos…

La Argentina que fue…, por el procurador Carlos Armando Costanzo, fundador y director – organizador del Archivo Literario Municipal y el Salón del Periodismo Chivilcoyano, y miembro correspondiente, de la Academia de Folklore de la provincia de Buenos Aires y la Academia Porteña del Lunfardo.

En un tiempo fulero y tan obscuro, / hoy recuerdo, con facha dolorida, / la Argentina pulenta, ya perdida, / de la lunga honradez y del laburo. / Hoy recuerdo, y de pronto, bien carburo, / la Argentina que fue… – mistonga herida -, / de una dicha fratela y compartida, / forte unión y un debute y gran futuro… / Hoy recuerdo, el amor de tantos cuores, / la nobleza fetén y los valores…, / los recuerdo, chabón, con añoranza… / Y así, en medio de chantas y choreo, / a pesar del balurdo, siempre creo / en mi posta país y la esperanza.