Fundación de la Escuela primaria Nro. 48 “Rosa Pagano de Siri”

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Don Andrés Vaccarezza (1831-1925), fundador del pueblo del Alberti, el 27 de octubre de 1877, y primer presidente de la Cooperadora de la Escuela primaria Nº48

Don Andrés Vaccarezza (1831-1925), fundador del pueblo del Alberti, el 27 de octubre de 1877, y primer presidente de la Cooperadora de la Escuela primaria Nº48

La Escuela primaria Nro. 48 “Rosa Pagano de Siri”, ubicada en el Cuartel VI, de nuestro distrito de Chivilcoy, en un paraje geográfico, denominado “La Carlota”, inició su labor educativa, en el mes de marzo de 1909, y en un comienzo de la actividad pedagógica, ocupó un inmueble arrendado, de Don José Ramundo; el cual, se encontraba situado, sobre el camino que conducía a la localidad de Alberti, en cercanías de la población rural, llamada Larrea, dentro de la órbita jurisdiccional de dicho partido albertino. La primera directora, del citado establecimiento, fue la docente, María Luisa Esquiroz; sumándose, dos meses después, el 21 de mayo de 1909, otra maestra: María Cristina Gago. El 5 de abril de 1909, en tanto, se había constituido la primera Comisión Cooperadora de la Escuela, que hubo de presidir, Don Andrés Vaccarezza (1831 – 1925), el ilustre inmigrante italiano fundador y propulsor de la ciudad de Alberti, nacida el 27 de octubre de 1877. Hacia el mes de marzo de 1922, el citado establecimiento de enseñanza, efectuó su traslado, a la zona del Cuartel V, de nuestro distrito de Chivilcoy; ubicándose en una finca de Don Enrique Zeppa, próxima a la localidad rural de Ayarza, y tres décadas más tarde, en 1952, Doña Rosa Pagano de Siri, una inmigrante de origen itálico, antigua vecina del lugar, efectuó la generosa donación de un predio, sobre el cual se construyó el edificio de la Escuela. El domingo 10 de septiembre de 1967, se llevó a cabo la ceremonia de inauguración oficial del nuevo inmueble escolar; en tanto, el 2 de diciembre de 1984, al celebrarse los 75 años – las “Bodas de Diamante” – del establecimiento, se le impuso a éste, el inolvidable y querido nombre de la donante del solar y gran benefactora de la Escuela, Doña Rosa Pagano de Siri.