Nacimiento del poeta, periodista y diplomático chivilcoyano, Leopoldo Díaz.

El poeta y diplomático chivilcoyano, Leopoldo Díaz (1862-1947).

El poeta y diplomático chivilcoyano, Leopoldo Díaz (1862-1947).

El 11 de agosto de 1862, nació en nuestra ciudad, en el hogar del comerciante malagueño, Don Lorenzo Díaz y Doña Martina Calderón, el inspirado y eximio poeta, periodista y diplomático chivilcoyano, Leopoldo Díaz; diestro y brillante sonetista y, caracterizada personalidad, en la historia de la literatura argentina y americana. Desde la tierna etapa de su adolescencia, se manifestó en él, una particular inclinación poética, que fue luego, canalizando, a través de una prolongada y rica trayectoria literaria, donde se distinguió, por su exquisita sensibilidad espiritual, su claro talento creativo y, su elevado y puro lirismo. Durante su carrera diplomática, Leopoldo Díaz, se desempeñó, por 1885, como encargado de negocios, en el Paraguay; después, cónsul general en Suiza y en Noruega, y más tarde, ministro, en Asunción, y en Caracas (República de Venezuela). Incursionó en la labor de prensa, y llevó a cabo, numerosas y apreciables traducciones, de autores franceses, italianos, ingleses y portugueses. Leer más…

Nacimiento del poeta, periodista y diplomático chivilcoyano, Leopoldo Díaz.

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El poeta y diplomático chivilcoyano, Leopoldo Díaz (1862-1947).

El poeta y diplomático chivilcoyano, Leopoldo Díaz (1862-1947).

El 11 de agosto de 1862, nació en nuestra ciudad, en el hogar del comerciante malagueño, Don Lorenzo Díaz y Doña Martina Calderón, el inspirado y eximio poeta, periodista y diplomático chivilcoyano, Leopoldo Díaz; diestro y brillante sonetista y, caracterizada personalidad, en la historia de la literatura argentina y americana. Desde la tierna etapa de su adolescencia, se manifestó en él, una particular inclinación poética, que fue luego, canalizando, a través de una prolongada y rica trayectoria literaria, donde se distinguió, por su exquisita sensibilidad espiritual, su claro talento creativo y, su elevado y puro lirismo. Durante su carrera diplomática, Leopoldo Díaz, se desempeñó, por 1885, como encargado de negocios, en el Paraguay; después, cónsul general en Suiza y en Noruega, y más tarde, ministro, en Asunción, y en Caracas (República de Venezuela). Incursionó en la labor de prensa, y llevó a cabo, numerosas y apreciables traducciones, de autores franceses, italianos, ingleses y portugueses. Fue miembro fundador, de la relevante y prestigiosa Academia Argentina de Letras, creada en el año 1931, y asimismo, honrosamente, se lo designó, miembro correspondiente de la Real Academia Española. Gran artífice del verso, con una notoria influencia, en su estilo, de la mitología griega, de sus obras editadas, mencionaremos los libros: “Los genios”, “La cólera del bronce”, “En la batalla”, “Canto a Byron”, “Bajo relieves”, “Poemas”, “Las sombras de Hellas” “Atlántida conquistada”, “Las ánforas y las urnas”, “Traducciones”, “El sueño de una noche de invierno”, “Sonetos”, “Fuegos fatuos”, “Las galeras de oro”, etc. Le pertenecen también, los respectivos libretos, de las óperas: “Tucumán”, de 1916, escrito para el centenario de la Independencia Nacional, y “Ariadna y Dionisyos”, de 1919. Primo hermano del notable y malogrado poeta Carlos Ortiz (1870 – 1910), Leopoldo Díaz, falleció en Buenos Aires, a los 85 años de edad, el 28 de septiembre de 1947.